PANE SICILIANO

abril 21, 2008

4 TENTACIONES


Aunque con un poco de retraso, les muestro los resultados de mi segundo reto con Bea. Esta vez el reto lo propuse yo. Me apetecía hacer pan, amasarlo, hornearlo… sin utilizar ni la Thermomix ni la panificadora, que es lo que uso semanalmente para hacer el pan de molde.


Elegí por ello el libro de Peter Reinhart, El aprendiz de panadero. Es un libro que te explica muy bien cuáles son los procesos y fases por los que debe pasar una masa para convertirse en un buen pan. Hacer un buen pan en casa no es tan difícil, aunque laborioso.


¿Porqué entonces este Pane Siciliano? Sencillamente porque usa un prefermento y porque en su composición usa también la semolina o harina de trigo duro tan conocida por elaborar la pasta fresca.


En este reto no tuve dudas, ni tuve problemillas como en el anterior, el resultado fue el esperado.


Y mi casa olía como si fuera una panadería!!


Si quieres ver el Pane Siciliano de Bea, pincha aquí.


Pane Siciliano

Receta del libro, El aprendiz de panadero, de Peter Reinhart


Para la Pâte Fermentée:


140 gr de harina común

140 gr de harina de fuerza

5 gr de sal

1,5 gr de levadura instantánea

180-210 ml de agua a temperatura ambiente


Elaboración:


Mezclar las harinas, la sal y la levadura en un cuenco. Añadir 180 ml de agua, removiendo hasta que ligue y se obtenga una bola heterogénea, de modo que sea ni demasiado pegajosa ni demasiado rígida.


Espolvorear la superficie de trabajo con harina y colocar la masa encima. Amasar de 4 a 6 minutos o, hasta que la masa quede suave y maleable, adherente pero no pegajosa. Si tienes un termómetro de sonda, puedes comprobar su temperatura interior que debe ser entre 25-27º C.


Engrasar ligeramente un cuenco con aceite y pasa la masa al cuenco, moviéndola para que toda la superficie quede engrasada. Cubre el cuenco con film y déjala fermentar a temperatura ambiente una hora, o hasta que adquiera un tamaño 1 ½ veces el original.


Retira la masa del cuenco, amásala suavemente para que pierda aire y vuelve a dejarla en el cuenco. Cúbrelo con film y mételo en la nevera. Déjalo toda la noche. Puedes guardar la pasta hasta tres días, o hasta tres meses metida en una bolsa de plástico hermética y congelada.


Para el Pane Siciliano:


450 gr de pâte fermentée


225 gr de harina de fuerza


225 gr de semolina


9 gr de sal


4 gr de levadura instantánea


30 ml de aceite de oliva


20 gr de miel


300-350 ml de agua templada (32-38º C)


Elaboración:


Sacar la pâte fermentée de la nevera una hora antes de hacer la masa. Cortarla en unos 10 trozos con la ayuda de una espátula de panadería o cuchillo de sierra. Taparla con un trapo limpio y dejarla reposar una hora para que se atempere.


Mezclar la harina de fuerza, la semolina, la sal y la levadura en un cuenco grande. Añadir los trozos de pâte fermentée, el aceite, la miel y 350 ml de agua. Mezclar con una cuchara grande hasta obtener una bola. Si la masa queda demasiado rígida, añadir agua cucharada a cucharada hasta que se integre toda la harina y la masa quede suave y maleable. Si parece que queda demasiado pegajosa, no te preocupes, se puede añadir más harina durante el amasado.


Echar harina sobre la superficie de trabajo, pon la masa encima y empieza a amasar. Añade harina en las cantidades necesarias para que la masa quede suave y adherente, pero no pegajosa. Amasar durante 10 minutos. Formar una bola. Engrasar con aceite un cuenco y pasa la masa al cuenco, haciéndola rodare para que se impregne bien. Tapa el cuenco con film de cocina.


Deja fermentar hasta que doble su tamaño.


Divide la masa en tres trozos iguales. Moldéalas como si fueran baguettes, alargando cada pieza unos 60 cm y procurando que la masa pierda el mínimo de aire posible. Luego desde ambos extremos a la vez, ve enrollándola hacia el centro, formando una S. forra una bandeja con papel de horno y espolvorea con semolina. Coloca las piezas sobre la bandeja, rocíalas de agua, espolvoréalas con semillas de sésamo y pulverízalas con aceite de oliva. Cubre la bandeja con film de cocina sin presionar.


Mete la bandeja en la nevera toda la noche.


Saca la bandeja de la nevera y deja que la masa se atempere un par de horas.


Calienta el horno a 250º C, con la rejilla en posición intermedia. Asegúrate de haber colocado una bandeja para la cocción con vapor. Mete las piezas de pan el horno y vierte una taza de agua templada en la bandeja para que cree vapor suficiente. Cierra el horno rápidamente. Pasados 30 segundos, pulveriza las paredes del horno con agua y cierra. Repite este proceso dos veces más. Baja la temperatura a 230º C.


Hornea durante 15 minutos. Pasado este tiempo, gira las bandejas 180º y hornea otros 15 minutos o hasta que tenga un dorado uniforme.


Sacar el pan del horno y ponerlo en un soporte de bandejas para que se enfríe durante 45 minutos antes de cortarlo.


Esta masa es excelente también para hacer pizzas, panecillos pequeños y palitos.

Anímate y hazla, su sabor es exquisito!!